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Trucos para no tener una casa llena de pelos

Nuestros perros y gatos son uno más de la familia, nos encanta pasar tiempo con ellos, nos reímos con sus travesuras, acurrucarnos con ellos en el sofá es lo mejor de llegar a casa después del trabajo, nos hacen ser más activos al acompañarles en sus paseos, no pueden faltar en nuestras escapadas vacacionales, en fin, ellos siempre están en nuestros mejores momentos y les queremos, pero… ¿qué tal llevamos lo de llevar siempre pelo suyo en la ropa y recoger el que se va acumulando en alguna que otra esquina de la casa? Seguro que eso no es lo que más nos gusta de compartir la vida con estos maravillosos animales, ¿verdad?

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La muda es un proceso natural de renovación del pelo, asociada a los cambios de temperatura y el fotoperiodo, de ahí que las dos épocas de mayor caída sean la primavera y el otoño. Aunque esta es la teoría, el hecho de que a día de hoy los perros vivan en casa con nosotros y puedan disfrutar de calefacción en invierno y aire acondicionado en verano, hace que la muda no sea tan estacional como antiguamente, o como sigue ocurriendo en los perros que aún viven en el medio rural pastoreando, si no que podemos ver mudas «falsas» durante todo el año.

Además, la intensidad de muda va a depender de la raza del perro, del tipo de pelo, de la salud, de la calidad de la alimentación, del ambiente, etc, por lo que no en todos casos veremos la misma cantidad de pelo circulando por casa. Por ejemplo, si compartimos la vida con un Perro de Aguas apenas notaremos la caída de pelo, pero si en cambio tenemos un Husky seguramente podamos recoger tanto pelo como para rellenar una buena cantidad de cojines (y de paso renovar la decoración).

Entonces, ¿qué podemos hacer para disminuir el pelo que circula por casa?

  • Una buena rutina de cepillado ayuda a eliminar el pelo muerto, en las épocas de más caída se puede cepillar a diario, y el resto del año una o dos veces por semana serán suficientes (siempre teniendo en cuenta el tipo de pelo y utilizando un cepillo apropiado). Se puede aprovechar el ratito final del paseo para llevar a cabo esta rutina, el perro está más tranquilo y puede ser su momento relajante del día. El cepillado tiene que ser suave, comprobando que el cepillo que vamos a utilizar no lastime su piel, y en su duración justa, no por cepillar más vamos a conseguir que el proceso de muda termine antes.
  • Hacer coincidir un baño con los dos picos de muda es favorable, eso sí, antes hay que darles un buen cepillado para eliminar la mayor cantidad posible de pelo muerto y que no derive en nudos durante el baño. Por supuesto, siempre hay que utilizar champús específicos adecuados para su pH de la piel.
  • Los rodillos quita pelos suelen funcionar genial para retirar el pelo de la ropa, de las sábanas, incluso del sofá. En su superficie adhesiva se va pegando el pelo al hacerlo rodar, ¡nosotros siempre tenemos varios repuestos en casa! No pueden faltar en cualquier hogar con animales.
  • Para superficies en las que el pelo queda muy adherido, un buen truco es ponernos un guante de látex, mojarlo y frotar por las zonas del sofá, el sillón, la alfombra, la cama, etc que queremos dejar sin un solo pelo, la verdad es que funciona genial este truco.
  • Por supuesto, no podemos olvidarnos de pasar la aspiradora una o dos veces por semana para llegar a los rincones más complicados de la casa, es la forma más eficaz de mantenerla libre de pelos, aunque… no dura mucho, ¿verdad?
  • Pese a que ya hemos comentado que la muda es algo natural, no podemos olvidarnos de la importancia de la alimentación en la buena salud del pelo y la piel, una comida de calidad rica en ácidos grasos omega 3 y 6 hará que el pelo de nuestro pelo luzca fuerte y brillante. Además, debemos estar pendientes del protocolo de desparasitación para no llevarnos algún susto como la aparición de pulgas, sarna o cualquier otro parásito que pone en riesgo la salud de nuestro animal.

No debemos preocuparnos por la caída normal del pelo, pero ante la aparición de alguna zona sin pelo, eritemas, caspa, o una repentina caída más fuerte de lo normal, no dudemos en visitar a nuestro veterinario de confianza.

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